Los selladores de hormigón se usan cuando los agujeros perforados en el muro deben sellarse, impregnarse o laminarse permanentemente. Su aplicación evita la posible falta de estanqueidad que no puedan garantizar los sellos (sellos de brida, sellos compactos o sellos modulares).

El sellador entra por capilaridad, lo que garantiza que selle también pequeñas grietas que hayan podido producirse durante la fabricación del muro debido a un mal fraguado, también actúa como protección frente a la corrosión de cualquier acero próximo al elemento que deseamos sellar. 

Otros campos de aplicación además del hormigón son: ladrillos, soleras, sustratos minerales secos y sólidos, revestimiento primario, nivelación, lechada y producción de soleras. Ideal para imprimación adhesiva de superficies de hormigón y cemento.

Nuestros recubrimientos de alta calidad son de aplicación universal y consisten en una resina epoxi de dos componentes con alta resistencia a la compresión y a la tracción. Su manejo es rápido y fácil. Las temperaturas deben estar por encima de 0 ° C para que el recubrimiento fragüe bien. La temperatura de aplicación ideal es de 20 ° C. Al igual que al aplicar pintura a una pared, el sellador de hormigón se aplica al área de hormigón lisa, limpia, seca y sin grasa con un pincel.